¿Cuáles son tus creencias?
Una vez que las hayas detectado, lo primero que haces es declarar que se trata de creencias, es decir, algo que VOS CREES que es así, algo que al creerlo lo has incorporado a tu vida y en consecuencia a tus resultados. Una vez que lo etiquetas como una creencia, a continuación enfocate en las creencias que se pueden cambiar, fundamentalmente en las negativas, por ejemplo: “no sirvo para nada”, “esto no es para mí”, “ya no tengo edad para hacer eso”, etc…