En tiempos donde es frecuente que alguien se autodefina como depresivo, ¿no valdría la pena preguntarle sino estará triste, aburrido, desmotivado/a, angustiado/a,temeroso/a, abatido/a, decaído/a, desanimado/a, melancólico/a, o nostálgico/a entre tantas otras cosas posibles?. Cuántos mundos se abren al
cuestionar una palabra que en definitiva cuestiona una creencia cerrada
sobre nuestro padecer?. Sin embargo, como autómatas, repetimos la palabra"depresión", olvidando a una millonaria industria que factura
con su uso indiscriminado. Apropiarnos del "Poder del Lenguaje" y Cuestionar al "Lenguaje del
Poder" nos permitirá elegir la palabra protagonistas a la hora de
"construir" nuestra realidad capaz de nombrarnos y de definirnos a nosotros/as mismos/as. Cambiar tu comunicación interna,tu lenguaje hacia vos, es el principio de tu liberación personal. PROBALO!!!!